El color negro es el protagonista indiscutible
El negro, color que simboliza elegancia y sofisticación, vuelve a dominar la escena. Desde trajes sartoriales hasta blusas de seda, el negro se convierte en el hilo conductor de un armario refinado y versátil. Un homenaje a la sobriedad parisina, que no renuncia a tener un toque sensual.
Seda y algodón, microestampados y detalles románticos
La seda, el tejido por excelencia, envuelve el cuerpo en un abrazo suave y sensual. Los trajes de líneas fluidas crean una atmósfera romántica y femenina, con microestampados y detalles inspirados en la lencería. Un contraste perfecto para la rigidez del negro, que añade carácter a los looks.
Las chaquetas, protagonistas indiscutibles de la temporada, se presentan en dos versiones: la de corte entallado, inspirada en el New Look de Christian Dior que subraya la silueta femenina, y la de línea masculina, con un corte extragrande ideal para crear un look más contemporáneo. Ambas versiones son perfectas para crear outfits versátiles para cualquier ocasión.
La falda lápiz: una prenda atemporal
La falda lápiz, reinterpretada en clave moderna, es otro de los imprescindibles de la temporada. Gracias a los cortes sartoriales y a detalles como las cremalleras ocultas y las pinzas, realza la silueta femenina de manera elegante y sensual.
